La profesión farmacéutica puede asociarse con una infinidad de adjetivos: vocacional, científica, asistencial, colaborativa, multidisciplinar, proactiva… y podríamos seguir todo el día. Cada uno de estos atributos refleja una faceta indispensable de la actividad de los profesionales, no sólo en su labor tras el mostrador sino en los diferentes planos del ejercicio farmacéutico; desde el valiosísimo consejo farmacéutico hasta actividades más ligadas a la investigación o incluso a la divulgación, esta profesión sanitaria abarca un amplio abanico de tareas y conocimientos.
Con el objetivo de dar visibilidad a todos estos aspectos de la farmacia comunitaria pusimos en marcha On Farma Faes, una iniciativa que se desarrolló el pasado Infarma 2022 y consistió en una serie de entrevistas de profesional a profesional, dirigidas y protagonizadas por distintos profesionales de la oficina de farmacia, que pusieron el acento de las conversaciones en diferentes dimensiones de la realidad farmacéutica.
Durante los dos días de congreso pudimos escuchar de primera mano el punto de vista profesional sobre algunos de los retos más acuciantes que enfrentan las boticas a día de hoy, y pudimos constituir una fotografía que muestra un fragmento de la situación actual de la farmacia comunitaria en España. Hoy nos centramos en uno de los temas más visitados durante las entrevistas: el papel de la farmacia en el entorno digital.
El desafío digital
La digitalización de la oficina de farmacia, que hace unos años se veía como algo lejano y exclusivo, se ha convertido en uno de los caballos de batalla para gran parte de la profesión debido a los cambios de hábitos de los consumidores, tanto a la hora de informarse como de comprar. Y es que los profesionales tienen claro que la farmacia digital no es un concepto únicamente transaccional; «salud digital es mucho más que comercio electrónico de productos», afirmaba el farmacéutico Jaime Acosta en su conversación con Pedro Bergillos. El ser o no ser digital se ha convertido en un dilema cada vez más complejo de afrontar. En palabras del farmacéutico Víctor Ronda, «la farmacia puede elegir no digitalizarse, pero tiene que saber que está renunciando a una parte del mercado».
Hay muchas formas de tener presencia en el ámbito online para acercarse a unos usuarios para los que el ámbito digital se ha convertido en una región más de su rutina diaria. Y una de las claves para tener presencia en Internet es tener claro que, aunque el escenario sea otro, la identidad de la farmacia es la misma. En el caso de la farmacéutica Teresa Bonnin, el blog es una pieza central de su estrategia de comunicación: «la esencia de nuestra farmacia tiene que quedar en algún sitio, y el blog contiene esa esencia».
La presencia digital, sin embargo, no tiene sentido sin un propósito; no se trata de estar por estar, sino de estar con un objetivo claro. El digital es un espacio más donde realizar acciones destinadas a cumplir esas metas. La farmacéutica sevillana Gema Herrerías señaló en este sentido que su trabajo no lo pueden ejercer en Internet y que «su foco debe estar en dirigir a los servicios profesionales de la farmacia».
Otras dimensiones de la farmacia
Éste es sólo uno de los varios aspectos clave abordados durante las entrevistas de OnFarmaFaes. Puedes volver a escuchar todas las entrevistas en el siguiente enlace, y tomar conciencia de la fotografía completa que se reveló durante los dos días de congreso, en el siguiente enlace.